Una mañana de otoño, Carol y Vane se dirigían a clase para aprender a coser.
Aunque era difícil, sus profesoras eran muy majas y les gustaba mucho la escuela, antigua y luminosa.
Sin embargo aquel día, el día de Halloween, se respiraba una atmósfera distinta y extraña.
Iban hablando precisamente de eso cuando escucharon unos pasos tras ellas, y al girarse, les pareció ver algo al final del pasillo, que era aquello? Parecía una muñeca!
Se acercaron y cual sería su asombro al descubrir una Licca chan, alguien la habría olvidado? Que hacía allí? Era muy bonita pero había algo inquietante en ella, al mirarla mejor comprobaron que esta muñeca tenía tres piernas!
"Hola, soy Licca chan y estoy ma.."
(No responda a este mensaje si no le molan la pelis de terror.
Takara no se hace responsable de sus muñecas defectuosas.)
Carol le enseñó aquel mensaje a Vane, y entonces ella recordó una leyenda urbana japonesa:
"Cuentan que hace años, de la fabrica de muñecas Licca salió una serie defectuosa, porque tenían 3 piernas, pero se dieron cuenta demasiado tarde y algunas de esas muñecas llegaron a las tiendas. Los padres las compraron para sus hijas que, al sacarlas de la caja se asustaban y no las querían. Todas aquellas muñecas terminaron en la basura, nadie jugaría con ellas jamás...Algunas de ellas se convirtieron en una licca maldita, con una tercera pierna deforme. La leyenda tiene muchas versiones, pero la más popular es aquella en la que esta Licca con tres piernas te espera en un aseo y te dice:
Hola soy Licca chan, quieres jugar al escondite conmigo?
Y entonces saca un cuchillo y te lo clava. Es terrible! Por cierto me voy al aseo."
Vane se fue al baño, sola, y por supuesto no se dio cuenta de que la Licca maldita había decidido salir de la mochila de Carol e ir a esperarla al baño, porque su leyenda pega mas en un baño claro.
Mientras Vane hacía pis, Licca chan subió sigilosamente por sus medias,
pero la música de intríngulis era tan alta que Vane no se enteraba de nada, puede alguien bajar el volumen? Ya ni se puede mear tranquila en este país!
Y así, como quién no quiere la cosa, logró alcanzar el bolso de Vane para meterse dentro. Se supone que debería haber ocurrido una tragedia, pero no, esta Licca tenía una manía con meterse en los bolsos! Es como si quisiera que la llevasen a casa, o sufriese un curioso síndrome de cleptomanía inversa.
Aquel día Carol y Vane se fueron del cole un tanto alucinadas, " creo que hemos visto una muñeca que asesina gente, Kazuo Umezu nos está empezando a afectar, hablamos mañana, que vaya bien Vane"
" Oh! Que suerte tienen estas muñecas de que las quieran y jueguen con ellas! "
Al llegar a la tienda donde trabajaba, mientras Vane limpiaba Licca aprovechó para salir de su bolso y ponerse a inspeccionar.
Le gustó especialmente esta camiseta, por razones mutantes:
Vane estaba al lio y como futura víctima de peli mala, no se daba cuenta de nada, así que Licca estaba tan pancha, hasta le dio por lucirse en el escaparate de la tiendita:
La noche de Halloween era la única ocasión en la que una muñeca con tres patas molaba, y Licca Chan no se sentía tan diferente. Por eso cada año, al llegar el 31 de octubre, se atrevía a salir de su escondrijo y buscar nuevas víctimas con las que saciar su corazón de plástico roto.
Pero basta de sentimentalismos! Llegó el momento de atacar, Licca chan se plantó frente a Vane y le dijo:
Hola otra vez moza, soy Licca Chan, quieres jugar al escondite conmigo?
Claro del pasmo la pobre mujer se desmayó!
"Un momento, que yo he venido aquí a cobrar mi venganza, no trates de confundirme que ando falta de cariño. vamos, prepárate y pronuncia tus últimas palabras!"
"Vale luego sacas el cuchillo y eso, pero como es que hablas castellano tan bien?"
"Si bueno, tengo una prima española que me ha ido enseñando, se llama Chabel...pero basta de charlas! A ver como era...ah si, Hola soy Licca chan, quieres ser mi amiga?"
"Caray por supuesto, eres guay! Otra hubiera aprovechado para venderte en Ebay por una pasta, pero yo soy una fan de la muñecas, te voy a dejar más bonica que una rosa!"
"Lo dices en serio? Osea, que no te doy miedo? Quieres llevarme a tu casa, lavarme, jugar conmigo y hacerme fotos y ropita? Seré como esas muñecas felices que he visto en tu cuarto?"
Que ricos, vamos vamos nueva mamá!
Ale vamos Licca! Y ni se te ocurra cortar a nadie por el camino!"
Eso es todo amigos, Licca chan y yo os deseamos una feliz noche de Halloween!!!!
Y con esta foto de nuestro escaparate preferido del Borne nos despedimos, un besote o tres, gracias por la visita!
Continuará...
Vane